En los últimos días se han incrementado los precios en muchos de los productos de la canasta básica, haciendo que muchos de estos productos se salgan del alcance de un gran sector de la población en el país.
Las causas de esta crisis económica que afecta los bolsillos de los que menos tienen, sin duda que son muchas, pero lo que cala es la bandera que se tomó y se ha tomado en tiempo de elecciones, sobre todo en las federales, que buscan renovar la Cámara de Diputados. El Gobierno de México podrá argumentar que esto es consecuencia de la pandemia por el muy famoso Coronavirus, que no es de dudarse, sin embargo el aumento en las cosas ya se venían dando desde los últimos años, y no solo es hablar de los últimos tres, sino que se tiene que reconocer que esta situación se ha dado desde sexenios anteriores al de la 4T.
Los mexicanos no quieren saber quién la rompió sino quien la va a zurcir, esperan que el que está actualmente en el poder haga algo para parar estos precios que están por las nubes, y no sólo en alimentos sino en energéticos como el gas LP que anda por arriba de los 700 pesos el tanque de 30 Litros, o las gasolinas que ya casi alcanzan los precios con los que recibió a este gobierno de la 4T. En este último energético, la gasolina, los mexicanos creyeron en la palabra de quien gobierna México en estos momentos, promesas que ahora pueden ser justificadas por muchos que defienden a capa y espada al gobierno de AMLO, pero que a pesar de su defensa, ahora da la razón de que los discursos fueron sólo promesas más a un pueblo que tiene la esperanza de que su situación cambie y alcance por lo menos para comer, ya no se diga para bien comer.
Verduras, frutas, granos, semillas, todo ha subido de precio y a pesar de que hace meses se anunció el aumento al salario mínimo, en muchos trabajadores no se ha visto reflejado y lo que es más preocupante, que ahora ya no alcanza para comprar lo elemental para llevar alimentos, a sus respectivas familias.
En este tiempo electoral, los ciudadanos ya no quieren escuchar promesas que saben no podrán ser realidad, necesitan realidades, necesitan acciones para que el pueblo vea que sus reclamos son escuchados.