Por: Redacción/ TEN/ Región
A pesar de que Jalisco es la entidad que más remesas recibe procedentes de Estados Unidos, la disminución en el precio del dólar y la inflación que se vive en México han provocado que se reduzca el poder adquisitivo de quienes reciben estos ingresos en el país, así lo dijeron en rueda de prensa especialistas del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA) de la UdeG.
Se estima que Jalisco recibe 9.11 por ciento del total de las remesas a nivel nacional; sin embargo, el doctor Antonio Ruiz Porras, detalló que este indicador no necesariamente refleja una mejora económica para los habitantes de Jalisco.
“Se incrementan los dólares por parte de las remesas, pero al incrementarse la cantidad de dólares se reduce su precio; en otras palabras, se revalúa el peso. Al mismo tiempo, tenemos un incremento de la inflación en México, esto significa, en términos prácticos, que los dólares que envío como remesas tienen menor valor adquisitivo”, mencionó.
“En el último año se incrementó aproximadamente 10.0 por ciento la cantidad de remesas, pero según las estimaciones se perdió aproximadamente un 25.0 por ciento del poder adquisitivo; recibimos más remesas, pero lo que la gente puede comprar con esas remesas es menos de lo que se podía comprar el año pasado”, agregó.
Ruiz Porras explicó que en el caso de Jalisco son diez los municipios que reciben más de 40.0 por ciento del total de las remesas, por lo que Ruiz Porras consideró que existe una desigualdad en la distribución de estos ingresos.
“Los grandes beneficiarios de las remesas son los municipios urbanos, los municipios que son ricos y no son rurales, que son los grandes perdedores con la depreciación de este poder adquisitivo”, aseveró.
El doctor Carlos Ignacio García Jiménez, investigador del Departamento de Métodos Cuantitativos del CUCEA, indicó que las remesas presentaron un crecimiento de 10.0 por ciento entre enero y mayo de 2023, en comparación con el año pasado y resaltó que del total de los envíos, más de 99 por ciento fueron a través de transferencias electrónicas.
Enfatizó que aproximadamente 4.0 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de México proviene de las remesas, en comparación con otros países como El Salvador, Honduras y Jamaica que dependen fuertemente del envío de dinero de personas migrantes.
“Puede haber un incremento ligero en las remesas, en parte porque el peso mexicano se está apreciando y eso hace que los consumidores empiecen a recibir menos pesos, eso genera presión en los migrantes para que envíen más dinero”, mencionó.
Adelantó que existe una estimación positiva en el envío de remesas a México en los próximos años; además, subrayó que gracias a la implementación de nuevos procedimientos en transacciones electrónicas las poblaciones rurales podrán beneficiarse más con el ingreso de este tipo de recursos.
La doctora Érika Ochoa Rosas, postdoctorante en Estudios Económicos del CUCEA, exhortó a la ciudadanía a fomentar una cultura financiera y estimular a los beneficiarios de las remesas para que adopten hábitos económicos para utilizar los recursos.
“Uno de los retos es potencializar las remesas a nivel individual. ¿Cómo? Aumentando los cursos de finanzas personales, divulgar temas de ahorro”, precisó.