SE REALIZÓ LA 44 JORNADA DIOCESANA PARA EVANGELIZADORES Y CATEQUISTAS EN EL SANTUARIO DE LOS MÁRTIRES.

Por José Manuel Ramírez.  Fotografías: José Manuel Ramírez Solórzano

 

Este sábado 11 de mayo, se realizó en el santuario de los Santos Mártires Mexicanos, la edición 44 de la Jornada Diocesana para Evangelizadores y Catequistas de la Arquidiócesis de Guadalajara en donde participaron alrededor de 2 mil 500 personas.

Convocados por la Sección Diocesana de Evangelización y Catequesis (SEDEC) bajo el tema “Testigos de la Fe”, los asistentes escucharon la catequesis del Padre Carlos Alberto Gómez Rodríguez, quien dijo que para ser testigo de fe se debe tener un carácter endeble y recordó a los catequistas que la mejor catequesis no es la que se da frente a un grupo sino aquella que se da con su testimonio de vida en medio de la sociedad.

 

“Un catequista es total, el catequista da su mejor catequesis no frente a los niños sino en la sociedad, con su testimonio, con su ejemplo, hace resonar su voz en el corazón y en la mente de todos”.

 

Recordó la encíclica del Papa Pablo VI “Evangeli Nuntiandi”, que habla sobe evangelizar y catequesis y en donde define lo que es esta acción en estos tiempos “lo dice, como él era, con poesía, anunciar a Cristo hoy, es poner en la conciencia, en los labios y en el corazón de todo hombre el nombre de Jesucristo, eso es evangelizar y catequizar”.

Por su parte, el Padre Armando González Escoto, recordó el reto que la iglesia, los evangelizadores y catequistas, tienen en este tiempo moderno en donde se debe de entender la realidad que toca vivir sin juzgar ni condenar a nadie.

 

Dijo que en una nueva sociedad en donde no se vive de acuerdo a los principios y valores de la fe, por lo que es importante combatir una epidemia cultural que va contra las creencias, no se asiste a la misa, no se aceptan los mandamientos y ante esto las nuevas generaciones (niños y jóvenes) quedan expuestos a “este virus de la las creencias”.

 

Habló sobre la importancia de que los catequistas conserven la identidad cristiana, “identidad que los católicos hemos perdido mucho”, dijo el Padre Armando.

 

Alentó a los asistentes para que, como verdaderos misioneros, los catequistas aprendan el idioma de los niños y de los jóvenes, que no es el de los adultos, para fortalecer la identidad católica, con entrega y solidaridad entre la gente.

 

“No entiendo lo que me dices, pero entiendo lo que haces por mí”, haciendo referencia a la necesidad del testimonio de amor al momento de compartir las catequesis.

 

La misa de clausura fue presidida por Monseñor Manuel González Villaseñor, Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Guadalajara y Coordinador de SEDEC, ante la presencia de la Virgen de Zapopan.